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Defendiendo la visión correcta de la historia de la Segunda Guerra Mundial

2025-08-25 15:08:08

Por Zhang Yuebin

El 6 de agosto, el Departamento de Estado de EE.UU. emitió declaraciones sobre la Segunda Guerra Mundial, afirmando que Estados Unidos y Japón "concluyeron una guerra devastadora en el Pacífico". La Embajada de EE.UU. en China posteriormente republicó esta declaración, lo que desató una amplia controversia en la opinión pública internacional. Esto resalta una vez más la vital importancia de establecer y defender una comprensión histórica precisa de la Segunda Guerra Mundial.

Definir la naturaleza de la guerra sigue siendo fundamental. Tanto la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa como la Segunda Guerra Mundial en su conjunto representaron una lucha de civilizaciones contra la barbarie: el progreso frente a la reacción. La agresión de potencias fascistas como Alemania, Italia y Japón representó una amenaza directa para la civilización humana, mientras que la resistencia del pueblo chino y de los pueblos de todo el mundo fue justa y progresista.

Ciertos actores distorsionan deliberadamente los hechos históricos para promover estrategias destinadas a contener a China. Explotando las narrativas de la Segunda Guerra Mundial mediante reinterpretaciones utilitarias, readaptan la historia con objetivos geopolíticos contemporáneos. En nombre de "convertir a los enemigos en aliados", incluso han descrito las relaciones entre un país antifascista victorioso y un estado fascista derrotado como "unión".

Dicha retórica deshonra la memoria de innumerables resistentes y mártires, incluyendo soldados estadounidenses que dieron su vida por la causa antifascista. Invertir la realidad y falsificar la historia para obtener beneficios políticos actuales no solo profana su sacrificio, sino que también corre el riesgo de fomentar el resurgimiento del militarismo. Al final, tales distorsiones son inevitablemente contraproducentes.

La visión correcta de la historia de la Segunda Guerra Mundial se basa en tres pilares: el respeto por los hechos históricos, el reconocimiento de las tendencias históricas y la confianza en el progreso de la civilización humana. Estos tres aspectos están interconectados y, juntos, revelan la verdadera naturaleza de la guerra. Solo mediante la comprensión y transmisión precisas de esta historia, la humanidad puede progresar hacia etapas superiores de desarrollo.

La victoria de la Guerra Mundial Antifascista fue un legado espiritual invaluable, alcanzado con inmenso sacrificio y sangre de los pueblos del mundo. Nunca debe ser profanada, distorsionada ni explotada con fines políticos mezquinos. La verdad se esclarece mediante el debate. Para defender la visión correcta de la historia de la Segunda Guerra Mundial, es esencial profundizar la investigación histórica, fortalecer la interpretación histórica y ampliar la difusión. La comunidad internacional ya cuenta con una valiosa experiencia al respecto.

En la década de 1950, Francia y Alemania establecieron un comité conjunto de libros de texto de historia para explorar interpretaciones históricas comunes, allanando el camino para la reconciliación y la cooperación. Desde entonces, numerosos proyectos de investigación transnacionales han producido avances significativos.

En octubre de 2006, los líderes de China y Japón acordaron iniciar estudios históricos conjuntos entre académicos de ambos países. Mediante intercambios, ambas partes alcanzaron cierto consenso sobre cuestiones históricas, lo que fortaleció el entendimiento mutuo y la confianza entre los pueblos.

Además, gracias a los esfuerzos de grupos de la sociedad civil, el Comité Editorial Conjunto de Académicos de China, Japón y la República de Corea publicó obras como "Historia Moderna y Contemporánea de Tres Países de Asia Oriental" y "Más allá de las fronteras de la Historia Moderna y Contemporánea de Asia Oriental", en los idiomas de los tres países, consolidando aún más una visión compartida y objetiva de la historia.

Más allá de la comprensión compartida entre los países agresores y las víctimas, la victoria de la Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa debe considerarse también desde la perspectiva más amplia de la historia mundial y el progreso humano. La Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa marcó un punto de inflexión histórico para la nación china en su camino hacia un gran rejuvenecimiento, y también marcó el comienzo del declive del imperialismo y el colonialismo occidentales.

Desde el siglo XVI, las potencias occidentales se han basado en la superioridad militar y tecnológica para expandirse globalmente, infligiendo un inmenso sufrimiento a países como China. La Guerra de Resistencia del Pueblo Chino contra la Agresión Japonesa no solo salvó a la nación china, sino que también conmovió a la humanidad en todo el mundo. La victoria de China revirtió radicalmente la arraigada tendencia de expansión occidental hacia el este y desencadenó una ola global de independencia y liberación nacional. Una vez puesta en marcha, esta marea histórica resultó imparable.

Solo con una visión correcta de la historia se puede permanecer a la vanguardia y trazar el rumbo correcto en medio de los profundos cambios globales actuales. Una visión correcta de la historia de la Segunda Guerra Mundial es un valioso tesoro espiritual para la humanidad. Las fuerzas de la justicia, que ya se han consolidado en el mundo actual, continuarán: defenderán la visión correcta de la historia de la Segunda Guerra Mundial, lucharán por el derecho a la independencia nacional y al desarrollo autodeterminado, y explorarán caminos hacia la modernización sin repetir el viejo camino de la hegemonía. El revisionismo histórico, con todas sus contradicciones, será finalmente barrido por la marea de la historia.

(Zhang Yuebin es investigador asociado especial del Centro de Investigación del Pensamiento de Xi Jinping sobre el Socialismo con Características Chinas para una Nueva Era, de la Academia China de Ciencias Sociales).